Pues sí, señoras y señores, ¡nos vamos de vacaciones! Pero, como siempre, sólo hasta primeros de septiembre, que el trabajo dignifica y no nos gusta vaguear en exceso. Una a la costa de Cádiz y otra a la de Huelva, con nuestros móviles siempre en contacto, pretendemos descansar y tomar fuerzas para el regreso. Esta despedida coincide con un evento muy especial, sobre todo para una de nosotras, y ahí lo dejamos... Pero no da tiempo de mostraros cómo hemos decorado la fiesta, porque aún no ha tenido lugar.... Lo que sí podemos es dar alguna pincelada, nunca mejor dicho, de algunos de los preparativos.
El pasado domingo, de nuevo y para no perder la costumbre, acudimos a nuestro mercadillo preferido, donde encontramos, entre otras muchas cosas (qué día tan provechoso), este marco que albergaba una labor que ya os mostraremos más adelante reciclada. Pero lo que nos interesa ahora es la moldura...
.... que quisimos cubrir de blanco...
También teníamos este "hermoso" espejo traído de aquel piso que desalojaron por venta.... ¿Os hemos dicho que era un cuarto piso sin ascensor? Pues de allí vino para caer en nuestras manos. ¡Más blanco!
¡Nuestro último hallazgo fue ayer mismo! Hay un contenedor en el que todos, pero todos los días, aparece algo que nos llama la atención. Y lo mejor es que está situado justo al lado del portal de una nosotras. Este maniquí de forja, que tiene a bien estar pintado ya de blanco, se viene también a nuestro evento.
Estas son algunos de los adornos que no conocíais que decorarán el recinto, junto con otros que seguramente reconoceréis. Pero esto ya será en septiembre. Nos da pena dejaros con la intriga, si bien es consecuencia del calendario vacacional.
Con este post inacabado volvemos a despedirnos hasta el 1 de septiembre, con muchas ganas de volver a retormar nuestro blog y vuestra compañía, aunque intentaremos estar presente en Instagram y Facebook.
Volveremos, igual que hoy, al finde frugal de Marcela, con nuevas propuestas decorativas.
¡Feliz verano!