Cuando llegamos a casa cargadas
de bártulos, - el bolso, las compras, la correspondencia recogida del buzón, las llaves….- nuestro mayor deseo es
soltarlo todo de golpe y despojarnos de tanto lastre… Cada una tiene en su
entrada una disposición a propósito para tal efecto, una más ordenada que la
otra, con una buena cómoda sobre cuyo sobre viene a parar todo lo mencionado…,
y una bonita butaca roja, más acorde para arribar las pertenencias. Lo que sí
tenemos ambas es un artilugio que ha perdido su sentido original… Ya no
recibimos cartas manuscritas que almacenar en nuestros porta cartas. Ahora los
llenamos de facturas, citas médicas, panfletos con las ofertas del
supermercado, tickets de compras, catálogos de esa multinacional sueca que
tanto nos gusta, e incluso esas tarjetas de visitas que ya no nos caben en la
cartera. Son nuestro refugio más preciado donde hallamos cualquier “papelajo”
que, en un momento dado, necesitamos imperiosamente. Por ello, y aunque hayan
perdido su función principal, no dejamos de darle su sitio en nuestros hogares.
¡Que vivan los porta cartas!
Ahora estamos viendo si guardamos todos los papeles, o decidimos tirarlo todo?
ResponderEliminarHasta cuando vamos a estar guardando, y lo mejor. Hacemos lo que guardamos?
Posiblemente sea vedó aquello que nos llega, sin haberlo pedido, y que dejamos para luego.
Pero hay que "coger el toro por los cuernos",y no pretendo ser dogmático, nada más lejos, pero si es cierto que vamos dejando asuntos para más adelante y al final, es un cúmulo de cosas, que no sabemos que hacer como ellas.
Nuestras relaciones son igual.
Las vamos dejando, hasta que...
Y eso no puedes ser, por una razón, por nuestros sentimientos, y porque nos vamos cargando la mochila de temas inútiles y muy pesados, y porque al final no sabemos distinguir lo que es válido y lo que no, y tiramos todo, y a todos los metemos en el mismo saco...y ni todo es lo mismo, ni todos somos iguales.
Por eso me parece ideal el elemento clasificador de papeles que entran sin avisar a muestras vidas.
Papeles del mundo, congregaos en la entrada y colocaos en el porta...
Llamamiento al futuro presente.
AMSC
Qué graciosa vuestra vaquita portatodo, jeje, me encanta!!
ResponderEliminarA mi los portacartas me seducen mucho como elemento decorativo y realmente también va a parar allí cualquier documento importante que luego, con las prisas, poder encontrar rápidamente.
Esos modelos tan vintage me requetechiflan, alguna vez pensé que podrían portar las tostadas en una mañana dominguera.....
Besotesss, feliz miércoles!!
Al igual que vosotras mi porta cartas es ese cajón de sastre donde acaba todo papel que se «precie» ser guardado, desde un post-it hasta una factura. Un día me encontré en el la espada del Príncipe de Blancanieves de una de las niñas, jajaja, y ahí se quedó como abrecartas.
ResponderEliminarSon piezas que siempre me han gustado y que me niego a desterrar de la decoración de casa.;))
Besitos para repartir.
Me ha encantado vuestro portacartas, es graciosisimo ;-D. Y me ha encantado también el que parece un pan de molde y esta hecho a crochet ;-). Pero creo que nunca he tenido, ni en casa de mis padres tampoco, un portacartas. Aunque me parecen una buena solución para dejar esas cartas de las que uno tiene que estar pendiente y recordar donde las ha dejado ;-)
ResponderEliminarBesos y feliz día
Qué fantástica colección de portacartas, cuánto encanto tienen todos!. Jamás he tenido uno, pero después de vuestro post, creo que es un indispensable para poder dejar toda esa colección de papeles que nunca sabe uno dónde archivar y a la vez tener a la vista.
ResponderEliminarUn besazo a cada una!
Los porta setas han pasado de ser elementos simplemente útiles, a ser también protagonistas de nuestras decoraciones. Vuestra vaquita es muy simpática y original. Me gusta!!!!.
ResponderEliminarBesos chicas.
Marìa
Su publicacion llega en un momento en que precisamente estaba pensando en alguna solucion, porque la isla de mi cocina siempre es un desastre lleno de notas, correo, cupones, sobres, propaganda, etc., que ya no se que hacer! Resolverlo es obvio, tengo que buscar un portacartas adecuado y bonito, porque me desespero con el lio de cosas que se hacen, y eso que me la paso recogiendo y acomodando. Como por arte de magia al dia siguiente se vuelve a repetir la historia! Jaja! Me encantan estas ideas, mi favorito es el de ustedes, es muy simpatico y le cabe mucho!!
ResponderEliminarBs chicas!
me quedo con el de madera, lindo, lindo,
ResponderEliminarsaludos
Pues ahora que habéis puesto las fotos, estoy pensando que no tengo portacartas. Me gustaría uno como el de la segunda foto, pero en dorado. Tengo una consola francesa muy antigua (de aquellas que llevan pan de oro con el espejo encima) pero es que mi casa es de un "ecléctico surrealista" porque sobre la cómoda te encuentras de todo: los catálogos de IKEA que son sagrados, los recibos de ENDESA (que es mejor no mirarlos), publicidad de todo tipo de descuentos en todas las perfumerías de la zona (que yo siempre guardo "por si acaso"), multas de tráfico, vamos de todo. Y normalmente el patinete de mi hijo (sí, el patinete) suele estar aparcado al lado. Lo que se lleva la guinda es el portero automático que pusieron -sin pensar- evidentemente al lado de la consola con el espejo. No es que el portero sea moderno, no, es que es "intergaláctico", vamos que se pegan bofetadas. Vamos, más chic, imposible. Si Constance se entera de lo que acabo de contar, me mata. Por cierto, me gusta el lapicero de sacapuntas. Un beso a las dos!!!
ResponderEliminar¡Hola, chicas!
ResponderEliminarMe encantan los porta cartas, aunque en realidad, nunca he tenido ninguno. Soy amiga de la carta escrita a mano, con sobre y papel elegante y bonito. Hubo un tiempo, cuando me vine a vivir aquí, que cogí esa costumbre, que al par de años se perdió. Habrá que retomarla de nuevo.
Una entrada la de hoy, genial.
¡Besotes y feliz día!
Que colección tan chula de portacartas , y que útiles son, yo tengo en la entrada uno que tuneé, lo tengo decorativo, con un estilo vintage así que ahí no pongo ningún folleto ni propaganda que valga, eso lo dejo para el que tengo en la cocina, donde voy acumulando los folletos, cartas del banco, tarjetas etc etc...me parecen muy útiles..aunque de vez en cuando hay que hacer limpieza porque acumulo mucho jiji
ResponderEliminarVuestra vaquita es de lo más original
Un besazo para las dos
Son muy prácticos esos artilugios! YO ya cuento con uno en la entrada para asuntos parecidos, jeje...
ResponderEliminarBesos!! Helena
Me encantan, tengo pendiente hacerme uno para uso propio. Hice uno hace tiempo pero se lo regalé a mi hermana, así que ahora toca otro para mi.
ResponderEliminarBesos
Yo tengo uno y ahí van todos los papeles que no saben que hacer con ellos, de vez en cuando tengo que hacer limpieza.
ResponderEliminarBesitos a las dos.
Vuestra vaquita es muy original! Desde luego cumple con la función de portar papeleo,más que cartas!
ResponderEliminarY es que en algún sitio debemos poner toda esa documentación que como decís en cualquier momento podamos consultar!
Bonita y práctica propuesta chicas!
Besos
Yo creo que todas llegamos a casa con las manos llenas y deseando soltar todo.
ResponderEliminarSon preciosos esos portacartas, yo no he tenido nunca,y ahora que toda la correspondencia la tenemos online aún menos,pero no descarto comprar uno para darle otro uso.
Besos a las dos
Chicas este post me está poniendo los dientes largos, he visto un par de ellos que son increíbles, aunque tengo un par de ellos que tampoco utilizo para el uso normal pues uno sirve de portalápices y el otro como expositor de pinturas acrílicas no tienen nada especial necesitan un cambio y ni un así creo que puedan compararse con esos que me mostráis.
ResponderEliminarMe conformaré con mirar .....BESOS
Hay algunos chulísimos!!! me encantan, son imprescindibles en cualquier casa, desde luego!!!
ResponderEliminarA mi me gustan estos artilugios y coloco cartas y postales que recibí hace mil años... los dejo curiosear a quien quiera y siempre les hace gracia. Un saludo cariñoso.
ResponderEliminarNo nos queda otra más que usarlos con un nuevo destino porque las carta brillan por su ausencia pero su belleza y surtido siguen muy vigente. Buena colección chicas!
ResponderEliminarExtraño los tiempos de las cartas...
ResponderEliminarPor otro lado, me ha encantado el portalápices con forma de tajador (¿sacapuntas?). Está precioso.
Son todos muy originales, una chulada, el de la vaquita me encanta, y por cierto, el lapicerero también. Besos a las dos.
ResponderEliminarHola! Yo el que tengo es para guardar las cartas del banco y facturas :(.
ResponderEliminarMe encana vuestro porta caras de la vaquita, es tan mona!
Besotes!
Adorable vuestra vaquita es una monada!
ResponderEliminarPreciosos y muy prácticos los que nos enseñáis!
Besos guapas
Desgraciadamente cada vez menos cartas... hasta las facturas en papel se reducen... Yo sigo enviando postales de los lugares que visito y postales de navidad
ResponderEliminarEs verdad que ya no recibimos cartas manuscritas, pero siempre nos quedarán las del banco :) Lo importante aquí no son las cartas, el contenido, sino el continente. Precisos e inspiradores ejemplos chicas. Besos para las dos.
ResponderEliminarChicas,qué chuladas!! Me encantan todos,sobre todo el vuestro de la vaquita.
ResponderEliminarPues si que nos necesarios y unos auxiliadores de aúpa ;) jajaja
Muchos besos,guapas mias! :)
Una selección preciosa de portacartas, queridas amigas. El rosa desgastado me ha robado el corazón.
ResponderEliminarEl portacartas es un objeto que no tengo en casa, y no porque no me gusten precisamente, sino porque conociendo como conozco a "los habitantes de mi casa", les vendría estupendo para llenarlo de todo papel con el que no supieran que hacer jajaja... me niego a tener más motivos de persecución y discusión jajajaja
Vuestra vaca es simpatiquísima, chicas! Un beso grande, preciosas, y muy feliz semana.