miércoles, 19 de octubre de 2016

Sin tarta

Esto de las bodas siempre ha sido para nosotras, las mujeres, un tema atractivo en lo que respecta al romanticismo que lógicamente se desprende de ellas... Pero también nos encanta la parafernalia que conlleva; el traje, las flores, la música, la indumentaria de los invitados, el banquete.... Todo lo que la celebración en sí pueda convertir ese momento tan especial en algo para recordar. Nos pensamos hasta a quién dar el ramo (lo de lanzarlo no era usual en las fechas en que ambas nos casamos), elegir padrinos (padre de la novia y madre del novio, como es tradicional, en nuestro caso), e incluso regalar a alguien querido los elegantes muñequitos contrayentes que adornan la tarta.... Una de nosotras recuerda haber dado el ramo a su querida prima Blanca, la mas pequeña de las niñas de la familia, aunque aún sigue quebrándose la cabeza en quién se quedaría la famosa parejita nupcial.... Demasiados nervios como para recordar todo lo de ese día.... La otra de nosotras sí guardó sus pequeños novios y los tiene a buen recaudo, aunque al novio le falta la pajarita, a ella el velo y los ojitos...














Y ahora, siguiendo con nuestra costumbre de dejaros intrigadas, averiguad cuál de las dos sigue casada....



lunes, 17 de octubre de 2016

Casualidades cósmicas

El otro día vendimos un platero de nuestra tienda. La compradora es amiga y clienta nuestra, pero para nada nos esperábamos su mensaje al móvil interesándose por él, sobre todo porque lleva a la venta cierto tiempo durante el cual ella ha adquirido otras cosas. A los tres días de la compra le suena el teléfono a una de nosotras y es un señor preguntando por el platero en cuestión. Nos sonó tan raro y era tanta la coincidencia que la que respondió al aparato va y le suelta: "- Enrique, (que es el nombre del marido de nuestra amiga), ¡menos guasa con el platero!" Silencio sepulcral al otro lado de la línea. Un calor intenso e inmediato subiole por el cuerpo a la telefonista en apuros, al darse cuenta de que no era el tal Enrique gastándole una broma. "-¿Oiga?" susurró la susodicha roja como un tomate, "- Vamos a ver, ¿vende o no vende usted un platero?", contestó el buen señor. Todo lo demás es un rosario de disculpas por nuestra salida de tono que el buen caballero aceptó sin entender muy bien lo que pasaba, y nuestra promesa formal de buscarle uno lo más parecido posible... ¡Mechachis, qué cosas nos pasan! Pero es que tiene guasa el asunto: el pobre platero aburrido de esperar dueño, y...¿en tres días dos pretendientes?

Mucho tiempo también llevábamos con estas fotos en un borrador, tan sólo a la espera de encontrar nuestro propio especiero de este estilo, y es que nos enamoramos al instante de estos pequeños mueblecitos que tanto sabor dan a la cocina. Pues el mismo día y en el mismo mercadillo encontramos dos idénticos en diferentes puestos... ¿Será posible, con la de tiempo que andábamos buscando uno? Alineación de astros, conjunción de planetas, choque cósmico, encuentros en la tercera fase... ¿Qué será lo que propicie estas casualidades de la vida que nos dejan con el interrogante eterno y la sensación de que el control no está precisamente en nuestras manos?





Foto


Foto


Foto


Foto

Ahora sólo falta encontrar otro platero. Os podéis imaginar que, precisamente por buscarlo, no aparecerá por ningún sitio... A ver cómo le explicamos a ese posible cliente que, además de las estrellas, la ley de  Murphy también cuenta...



viernes, 14 de octubre de 2016

Almendros de otoño...

Así tal cual nos encontramos este maniquí entre dos contenedores, ¡etiqueta incluida! La verdad, nos pareció tan increíble que, antes de cogerlo, miramos alrededor nuestra por si hubiera una cámara oculta... Ya dentro del taller, y más tranquilas, nos pusimos a investigar qué porras le pasaría para semejante abandono en plena calle.



Ésto es lo que encontramos: la tela estaba llena de pequeñas manchas amarillentas como de humedad. ¡Pero había que fijarse un poco para detectarlas!


Estuvimos sopesando si darle con agua y amoniaco para tratar de limpiarlo, o cambiarle drásticamente el aspecto. ¡Esto último era lo más atractivo! Para lo que teníamos en mente necesitábamos unificar previamente la superficie, pensamos en pintura para tela pero, en todas las instrucciones que leíamos, era necesario pasar la plancha por detrás para fijarla, cosa imposible en este caso. Y como nosotras somos impacientes e impulsivas y cuando queremos hacer algo es ahora o ahora, cogimos por banda la imprimación y punto.


Se nos terminó la imprimación casi al final y los últimos brochazos los dimos con pintura acrílica blanca... ¿Os hemos hablado de nuestra impaciencia? Aunque también somos resolutivas, ¡qué caray!


Como es acostumbrado, pasamos una lija suave por toda la superficie para que quedara lisa y lista para continuar. ¿Os hemos dicho que íbamos a usar servilletas? Pues éstas son las elegidas.



Los almendros en flor de Van Gogh se adherían a la perfección al esbelto cuerpecillo.... Fuimos cortando trozos con las manos y pegándolos aleatoriamente con cola blanca diluida en agua.



Y así quedó.




Decidimos salvar la pasamanería para dar algo de contraste.


Dos capas de barniz para terminar (qué desastre..., también se nos acabó la cola...), ¡y listo para lucir palmito!


Nos llevamos a esta señora descabezada y sin extremidades a visitar el Finde Frugal de Marcela Cavaglieri. Seguro que nuevamente nos sorprenden, ella y las demás participantes, con originales propuestas.


¡Feliz fin de semana!

miércoles, 12 de octubre de 2016

Libros de mesa de café...

Hace unos días, y con motivo de una celebración especial, una de nosotras le regaló a su media naranja un par de libros, entre ellos uno de pequeño tamaño con las pastas en color rosa "fosforito" y que reza por título ¿Qué es la arquitectura? En cuanto la hija del homenajeado, una de las Julias, lo vio, dijo, "-Anda, eso es un libro de mesa de café", "-¿El qué?", preguntamos al unísono sus progenitores, "Sí, volúmenes bonitos, llamativos, especiales, ideados sobre todo para decorar; Kim Kardashian ha publicado uno", "¿¿¡¡.................¡¡¡¡?? Fue todo lo que una de nosotras alcanzó a articular... Acabáramos, ¡ni en mil años pudimos imaginar que la Kardashian fuera a aparecer en uno de nuestro post! Aunque, bienvenida inspiración, Julia. Claro que habíamos reparado en esos auxiliares (veladores, carritos, pequeñas estanterías....) presididos por uno o varios tomos de llamativa encuadernación, pero nunca nos dio por pensar que éstos tuviesen un fin ornamental, e incluso que se hubiera acuñado un término para definirlos. De hecho, nosotras también tenemos algún que otro ejemplar en la consabida mesita, aunque con una estética más vintage, pues siempre hemos visto en la literatura mucho más que una lectura, amando las obras hasta el punto de disfrutar con su presencia y su protagonismo.







Foto


Foto


Foto


Foto



Nosotras no tendríamos el "book" de la famosa en cuestión decorando nuestras casas, pues no nos parece muy familiar presidir el salón con tanta exuberancia y protuberancia... Aunque es una opinión completamente personal, que conste. Y vosotr@s, ¿tenéis algún libro con especial presencia en vuestro hogar?


lunes, 10 de octubre de 2016

Escondido en las alturas...

Insistimos, estamos hasta las narices de la adicción de nuestros hijos a los móviles .... Nos ignoran e ignoran al resto del mundo cuando se sumergen en ese rápido movimiento de pulgares que les hace "comunicarse" con su círculo de amistades que, por cierto, es casi inagotable, Porque... ¡vaya la vida social que tienen los adolescentes de hoy día, contra! A lo que vamos, que hay veces que nos sublevamos, los castigamos y escondemos sus celulares (amigas de América, nos encanta esta denominación) donde menos pueden imaginar que estarían... No vamos a dar ideas porque sabemos que nos leen, ya sabéis...  Lo que ya no hacemos es lo que en un principio, y es situarlos en estantería altas para que no llegaran. Ambas somos de buena estatura, claro que los tacones ayudan a ello, y nada nos parecía mejor que los escondrijos en los mencionados estantes para evitar su alcance. Pero los niños son listos y... ¡crecen! ¿Lo sabíais? ¡Y lo hacen por minuto! Ahora nos quebramos la cabeza buscando un lugar más inaccesible y original para sus "extensiones de dedos y orejas".., y nos dedicamos a decorar nuestros antiguos, y elevados, refugios de telefonía. 












¿Y vosotr@s, escondéis algo en la alturas?



Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...