Una de nosotras odia las mamparas...., esas de los baños, las que protegen de las salpicaduras de la ducha. Y es que la de su cuarto de baño (ese que lo mismo es para féminas que para varones porque su casa no da para más) tiene una de tres cuerpos que siempre se engancha al abrir y cerrar... Se descuelga, saliéndose de su riel (es corredera, se entiende), su dueña la coloca y se vuelve a descolgar... Un verdadero tostón. Eso no quiere decir que las mamparas no sean una buena solución para los tsunamis que pueden llegar a provocar un buen remojón. Pero hay que reconocer que, con gusto, unas buenas cortinas decoran de manera mucho más tradicional e incluso retro, un bonito cuarto de aseo.
Y vosotros..., ¿os quedáis con las mamparas o con las cortinas?
Por cierto, nos tomamos descanso el miércoles. Os deseamos una feliz entrada de año 2015, año en el que podamos seguir compartiendo nuestras ideas, vivencias y tan buenos momentos como hemos tenido con vosotr@s en el año que se va. ¡Nos vemos el viernes!
¡Feliz y próspero 2015!