Petit point

Ya sabéis de sobra que el amor por la costura es un tema que entre nosotras no compartimos, sin embargo, coincidimos en adorar el crochet y en ser incapaces de bordar. Y es que está claro que no somos nada laboriosas en este sentido...Y precisamente por no serlo, admiramos a quién lo es y las verdaderas maravillas que pueden llegar a realizar, en el caso que nos ocupa, con medio punto o petit point. Hace poco que una buena amiga, Amparo, nos envió las fotos de unas sillas que estaba arreglando su madre. Cual fue nuestra sorpresa cuando vimos que la tapicería de las mismas, asiento y respaldo, estaban hechas por ella de esta labor; una preciosa composición de flores para admiración de todo el que la vea. A nosotras este trabajo nos dejó con la boca abierta, por la paciencia, dedicación, habilidad y buen gusto demostrado; mirad...

Así que después de sobreponernos por tanta belleza, no pudimos dejar de investigar qué otras ideas decorativas podríamos encontrar con petit point.

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¿No os han entrado unas enormes ganas de bordar algo? A nosotras se nos ocurre negociar con Amparo madre, a ver si con ese arte nos hace algo a nosotras... Un beso, Amparo, ¡aquí tienes a dos rendidas admiradoras!

El "seiscientos"...

El padre de una de nosotras, durante los últimos años de su vida, tenía ciertas dificultades para mantener el equilibrio, y usaba bastón para sentirse seguro cuando daba sus largos paseos vespertinos. Se levantaba de su sillón favorito (ojito que ninguna de sus hijas se lo apropiara por un minuto, jeje) y decía en voz alta: "Voy a coger el Seiscientos y me voy a dar una vuelta. Besitos varios, que no tardo". Directamente se iba hacia la esquina del salón donde, en un paragüero, tenía su pequeña colección de bastones (o "Seiscientos") y hacía su turné diaria por el centro de la ciudad. Siempre decía que le hacía atractivo ir con su cayado, y la verdad es que no mentía. Era presumido como él solo, tanto que nunca permitió a sus nietos que le llamaran abuelo. Él era "Jan" para los niños de la familia  (de esa manera se "autobautizó" al nacer el primero de los vástagos de su hija mayor, un diminutivo de su nombre, Julián para los adultos).

Esta entrañable historia nos sirve para introducir las imágenes sobre bastones en decoración que hemos encontrado por la red (y por casa del Dr. Jan)

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 Decoran, ¿verdad? Va por tí, Jan...

Nos hemos vuelto minimalistas...

En realidad, eso es mucho decir... Difícil seria, la verdad, que tal cosa ocurriera. Y es que, en este momento de nuestras vidas, no es una opción estética que nos atraiga demasiado. Sin embargo, hay rincones y espacios que alcanzan su máxima belleza con la sencillez. Cualquier otro aditamento estropearía la magia que, a veces, se alcanza con una "simple" composición. Y si ya hicimos un post sobre el horror vacui, hoy giramos ciento ochenta grados, y nos sacudimos los excesos para sumergirnos en el relax de estas imágenes.

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Y así, ligeritas de equipaje nos despedimos hoy, no sin antes comentaros la suerte que tenemos.

¡Si, si! Ninguna de las dos ha sido muy afortunada nunca en sorteos de cualquier tipo... y, llegamos al mundo virtual y, de golpe y porrazo, nos tocan dos premios, dos, y sólo por escribir un comentario en blogs que seguimos con muchísimo gusto. ¡¡Esto es lo que se llama ser "suertudas" por partida doble!!

Nuestra querida amiga Deba Debahuti, del blog Susurros Vintage, sorteó hace unos días una preciosa caja decorada por ella con mimo y dedicación. ¡Cual fue nuestra sorpresa al ver que nos había tocado a nosotras! Pues aquí os la mostramos, así como los dos paquetitos que había en su interior con un detalle personalizado para cada una de nosotras, ¡¡con nuestra inicial!! 

Por otro lado, Andrea G. del bolg La chacha dot com, sorteó unas semillas de flores y, ¡aquí están! ¡Venidas directamente de Canadá! Menudo viaje... Ya lo quisiéramos nosotras, pero en sentido inverso, jeje. En breve las plantaremos y os contaremos cómo van evolucionando.

¡Que tengáis un fin de semana estupendo!

Cavalleria rusticana

Sicilia, siglo XIX... Es el domingo de Pascuas. Santuzza, una buena muchacha, en la plaza del pueblo, se preocupa por la conducta de Turiddu, su novio, quien ha comenzado una relación amorosa con Lola (su amor de siempre y ahora casada con Alfio).

Santuzza cuenta sus sospechas a Mamma Lucía, la madre de Turiddu, pero ella se evade. Entonces, se dirige directamente a Turiddu, apelando a sus sentimientos de justicia y reprochándole los amoríos clandestinos. Pero el joven se disgusta ante la escena de celos y golpea a la muchacha. Santuzza, despechada, le cuenta a Alfio lo que sucede, y éste reta en duelo a Turiddu. Finalmente, el muchacho se emborracha y se despide de su madre, antes de que Alfio lo mate.

Una preciosa y cortita ópera, obra de Pietro Mascagni, nos da pie para introducir imágenes de un estilo decorativo del que nos enamoramos constantemente... El estilo rústico impregna nuestros hogares, incluso en grandes urbes, con detalles, con texturas naturales, con la simpleza de lo campestre...

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No, si finalmente vamos a combinar perfectamente el campo con los tacones...

Femenino y Masculino

Blanco y negro: un delicioso helado Magnum (ummmm, ¡qué rico!)

Norte y sur: aquella serie televisiva americana...

Positivo-negativo: ¿las pilas?

Alto-bajo: Tip y Coll (¡vaya tíos más graciosos!)

Agua y aceite: con tomate, ¡menudo gazpacho!

Frio y calor: las manos y el corazón... (en ese orden)

Hombre y mujer... jejeje... Ahí os dejamos unas cuantas imágenes sobre lo que este binomio perfecto e imperfecto puede dar de sí en decoración... que, a fin de cuentas, es a lo que nosotras nos dedicamos...

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Y este post, con vuestro permiso, se lo dedicamos a nuestras medias naranjas, que nos apoyan, nos leen cada día, se ríen con nuestras cosas y lloran con nuestras preocupaciones...

¡Va por ellos!

Cabeceros de espejo

Nos llamó mucho la atención este cabecero de espejo que encontramos casualmente por la red. Con su marco de líneas clásicas y su precioso espejo biselado, nos pareció el colmo de la elegancia y la delicadeza. Además, tiene el encanto de reflejar el resto de la habitación, aumentando la sensación de amplitud y potenciando la decoración de la misma. Así que nos pusimos manos a la obra para encontrar otras propuestas similares, con el denominador común del espejo como guardián de nuestros sueños. ¿Qué opinará el Feng Shui de ésto?

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Y es que esta posibilidad nos seduce, y mucho. Y a vosotros, ¿qué os ha parecido?

Por cierto, nuestro próximo post se publicará el Lunes de Pascua. Nos tomamos estos próximos días de descanso, como imaginamos haréis much@s de vosotr@s, aunque intentaremos estar pendiente de las publicaciones que haya.

¡Felices días de vacaciones!

¿Bromea o qué? ¡La bola entró..!

Si, sí,... mucha mofa vemos nosotras con eso de los tacones.... Pues que sepáis que, a diario (cuando podemos, jeje), nos colocamos los botines y, junto con nuestras amiga María José (una de ellas, que son tres las MJ allegadas...), nos ponemos el turbo y... ¡no veáis el ritmo que cogemos! Desde nuestro barrio llegamos a velocidad del rayo hasta el infinito... ¡y más allá! No nos gusta hacer deporte, ¿qué le vamos a hacer..? Dejamos el paddle por puro aburrimiento y, como hay que  moverse, porque hay que moverse..., pues decidimos andar a buen paso por las tardes para ejercitarnos y no quedarnos anquilosadas.... (Por cierto, a quién corresponda..., nosotras también hacemos 6 kms en 55 minutos). Y aunque no nos guste especialmente el ejercicio físico, nos encanta ver cómo lo deportivo se aplica a la decoración.

Este post va dedicado a otra de nuestras amigas virtuales, Leticia Pelegrin... quién con su "activo" blog Sin Pereza, nos está haciendo entrar por la vida sana, jejee.

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En cuanto al título..., a ambas nos encanta el tenis (verlo más que practicarlo, ya os imaginaréis...) y qué mejor forma de homenajear a este deporte que con la famosa frase de Mc Enroe en Wimbledon al árbitro Ted James cuando dio por mala una bola del tenista (...You cannot be serious!... the ball was on the line!).

¡Buen y deportivo lunes!