Hoy queríamos justificar un poco nuestros gustos en cuanto a "colorines" se refiere... Ya nos tenéis por amantes de los verdes, en concreto por el verde mint, sin descartar todas las tonalidades del color de la hierva, siempre que no sean demasiado estridentes. Esa tibieza es la cualidad que nos gusta de los tonos pastel, de los tonos viejos o antiguos. Quizás los rosas son los que se llevan la palma en cuanto a que no suele haber un matiz que nos disguste, pudiera ser porque el color femenino por excelencia, no posee estridencia alguna, desde el magenta al rosa chicle, del rosa viejo al salmón, del fucsia al rosa palo, del rosa bebé al buganvilla. Y a este último hemos llegado. Hoy hemos rescatado un cuadro realizado por la madre de una de nosotras, a la que queremos dar un pequeño homenaje pues lleva un verano poco agraciado, aparte del tema pandemia, que ya es decir.... Estando en la casa de veraneo, tuvo una fatal caída que partió su cadera, con la consiguiente operación para colocar la consabida prótesis. Ahora está en período de lenta recuperación. Su oleo de buganvillas han cautivado nuestro corazón y esperamos que los vuestros.
